Servicio de Atención a Familias (SAF)

“Me gusta venir aquí porque es donde me encuentro bien.
Siempre estoy pensado y dando vueltas a las cosas y cuando vengo aquí se me va todo de la cabeza, parece mentira, tengo aquí un tratamiento. Me siento tranquila. Vosotras os portáis muy bien con nosotras, no se puede comparar con otros servicios… me gusta mucho. Aunque a veces tengo lo que tengo, me gusta venir, cuando no me siento bien hago el esfuerzo, y después se me van los malos pensamientos.
Me gustan las actividades para mejorar la educación de los niños. Hay cosas que me encantan: cuando estamos todas juntas y compartimos lo que nos pasa. Me gusta cuando hacemos los talleres de cocina, cada una aporta sus habilidades; cuando las educadoras dan consejos en el Grupo de Madres.
He aprendido muchas cosas en el Grupo de Madres, he aprendido mucho a valorarme a mí misma; antes no me valoraba. Siempre has oído que no eras nadie y no es así. Valorarse una misma es lo más importante.
Me siento muy bien en el grupo. Las educadoras, son como mis propias hermanas, me siento tranquila… si tengo ganas de llorar, lloro con vosotras, porque no tengo ningún rencor aquí y me siento segura . Cuando yo tengo algo me ayudáis. Son muchas cosas. Es como un niño cuando empieza a gatear, si no encuentra una mesa o una a mano para quitarle el miedo no puede andar. Yo valoro mucho la tarea de las educadoras, cuando hago balance pienso que sin este apoyo no sé dónde estaría, con tanto estrés y con tantas cosas que me pasan el único refugio que tengo es aquí. Hace mucho tiempo que nos conocemos, son muchas cosas”.